Resumen
La tuberculosis representó, desde principios del siglo XX, un grave problema sanitario para la provincia de Córdoba: sus aires eran ponderados por los médicos de la Argentina, lo que generó un flujo importante de enfermos, especialmente a sus sierras y hacia la ciudad capital. A principios de la década del '30, a pesar de la caída en las tasas de mortalidad por tuberculosis, un grupo de tisiólogos que se habían formado en la Universidad Nacional de Córdoba, presentó un plan de lucha contra la tuberculosis. Si bien este plan nunca se concretó, en él se pueden apreciar las principales líneas de pensamiento acerca de las causas de la enfermedad y cómo combatirla. La percepción de la tuberculosis como una enfermedad social, la necesidad de aislar a los tuberculosos, la desconfianza hacia el Estado para llevar a cabo el combate contra la enfermedad, la necesidad de una inserción más allá de los planos académicos y hospitalarios y el hincapié en reforzar la lucha en la ciudad de Córdoba, fueron parte de un pensamiento de una especialidad que comenzaba a conformarse.