Resumen
Este trabajo analiza la actuación de médicos y policías durante la epidemia de fiebre amarilla que tuvo lugar en la ciudad de Buenos Aires en 1871. Aunque las embestidas de enfermedades infectocontagiosas fueron recurrentes durante el siglo XIX, la epidemia de fiebre amarilla constituye un quiebre, no solo por sus dimensiones cuantitativas y por los efectos materiales sobre la ciudad, sino también por las querellas que suscitó entre discursos en pugna. En particular, se intenta mostrar aquí cómo las figuras de los médicos y los policías fueron posicionadas en relación al tema del héroe y del sacrificado en cumplimiento del deber.