Resumen
Para analizar la incorporación del género al campo de la salud, consideramos la producción científica, las políticas y programas de salud, además de las prácticas profesionales en el cotidiano de los servicios. Estos distintos planos de abordaje resultan necesarios por las diversas posibilidades que cada uno de ellos presenta ante dicha incorporación. En la producción científica, se identifica el crecimiento de la perspectiva de género, pero con baja inscripción metodológica del concepto; en las políticas y programas de salud, una ausencia de transversalidad y una presencia de inestabilidad temporal; y, en las prácticas profesionales, una incorporación más anclada en saberes prácticos que en la dimensión técnico-científica. El conjunto de las dificultades genera distintas tensiones en el desempeño cotidiano de los profesionales, entre la base científico-tecnológica y la base moral de la intervención