Resumen
Se revisa la inclusión del término género en siete documentos gubernamentales sobre salud y nutrición en México. Se interpreta la racionalidad subyacente a su uso, para concluir que se asiste a un complejo y desigual proceso de sensibilización de funcionarios/as e investigadores/as respecto al tema. Se hace un llamado a revisar cuidadosamente su aplicación, para identificar si se utiliza como sinónimo de mujeres, como comparativo entre mujeres y hombres o como herramienta para el análisis relacional de las jerarquías que establecen diferenciales sociales entre los sexos. Se documentan los casos en que se utiliza erróneamente como sustitución del término sexo, ya que mientras éste es una categoría descriptiva de los componentes biológicos, fisiológicos, genéticos y hormonales (datos mensurables), aquella es una categoría analítica que da cuenta de la subordinación, de las diferencias en el ejercicio del poder y su efecto en las condiciones de salud de las personas (categoría analítica relacional); es decir, permite analizar la dialéctica de las relaciones entre la biología y la sociedad.